Si aprendemos de esos errores, prevenimos que en nuestras próximas relaciones de pareja fomentemos estas mismas actitudes que luego se convierten en vicios, y terminan por volverse en costumbres o patrones. Por ello es indispensable aprender a reconocerlos y evitarlos.
Identifica y cambia tus actitudes
De acuerdo con el psicoterapeuta y experto en relaciones de pareja, Mark Manson, algunas de las malas actitudes que fomentan posteriores problemas, son:
1. Contar errores. Es cuando alguien con quien estás saliendo continúa culpándote por los errores del pasado que cometiste dentro o fuera de la relación. Si ambos llevan la cuenta de los errores de su pareja, esto se convertirá en una batalla para ver quién ha sido más descuidado a lo largo de los meses o años y por lo tanto se generará una deuda emocional.
2. Transferir emociones. Culpar a nuestras parejas de nuestras emociones es una sutil forma de egoísmo, y un clásico ejemplo de falta de mantenimiento en los límites personales. Cuando se establece el precedente de que tu pareja es responsable de cómo te sientes en todo momento (y viceversa), se desarrollarán tendencias co-dependientes.
3. Compensar. Cada vez que un gran conflicto o problema surge en la relación, en lugar de resolverlo, se le cubre con la emoción y los buenos sentimientos que vienen con la compra de algún regalo o de salir de viaje a alguna parte, ocultando permanentemente los problemas reales con placeres superficiales.
4. Sabotaje. Muchas personas tienen la impresión de que las relaciones estables son aburridas, por lo que intentan sabotearlas para hacerlas más interesantes. Cualquiera de los dos intentará generar problemas en su relación menospreciando o compitiendo con su pareja, buscando crear un conflicto sobre cosas insignificantes.
5. Tratar de cambiarla. Te enamoras de una persona por sus cualidades, su personalidad, su visión de la vida y sus metas (a veces hasta por sus defectos) pero en el transcurso de la relación, empiezas a intentar moldear a tu pareja para que cuadre con tus expectativas, cambiando en esencia las cualidades que alguna vez te resultaban atractivas.
Por ello, según Manson, una vez que se han identificado este tipo de conductas se deben compartir con la pareja, con la finalidad de tratar de mejorar la comunicación, honestidad y resolver los conflictos que todo ello genera. Asimismo, lo ideal es buscar ayuda profesional.