Los hombres encuestados categorizaron su cuerpo en una de estas 7 formas:
1. Pera: grupo con la mayor cantidad de miembros (49% de los encuestados). Tienen un cuerpo un poco más ancho en la cintura, pero con el torso delgado.
2. Pepino: es la figura deseada, son largos y delgados.
3. Tomate: son los típicos “llenitos” pero que no caen en lo obeso.
4. Ladrillo: incluyó a 9% de los participantes y se asemeja a la anatomía de Robbie Williams. Son tan musculosos que parecen piedras.
5. Chaucha: son aquellos hombres que se autoperciben como excesivamente flacos
6. Hombres de nieve: tienen una figura totalmente redonda.
7. Nachos: son la categoría dentro de la cual sólo se clasificó 5% de los encuestados. Tienen hombros anchos y una cintura pequeña.
Sorprendentemente, tras responder la encuesta, pocos hombres dijeron estar felices con su forma.
Casi la mitad confesó que debería bajar de peso y casi tres cuartas partes de los encuestados expresó que odiaba su cuerpo.
El psicólogo Brendan Gough, profesor de la Universidad Metropolitana de Leeds, cree que los hombres actuales se preocupan mucho más por su apariencia que las generaciones anteriores, dadas las grandes exigencias físicas impuestas por los medios.
En la encuesta también se descubrió que la edad en la que los hombres se sienten más cómodos con su cuerpo es a los 28 años. Uno de cada tres hombres expresó que a esa edad sentían que se podían poner lo que fuera y verse bien, además de que su peso era ideal para su talla.
Sin embargo, con la edad el metabolismo se desacelera y esos kilitos extra se empiezan a notar, provocando una gran insatisfacción e inclusive depresión entre los integrantes del género masculino.